Según estos grupos "no había fuerzas para hacer huelga", pese ha reunirnos en las noches de encierros más de 120 estudiantes; Según estos grupos "no había suficiente información", "no existía un discurso elaborado y convincente", "no daba tiempo a hacer difusión", pese a que el seguimiento de la huelga ha sido sobre un 90% ( a lo sumo han intentado entrar al campus menos de 60 estudiantes ). A pesar de ser cierto el poco tiempo de preparación, cuando se cuentan con fuerzas suficientes y con voluntad para sacar adelante la huelga se puede hacer, como hicimos las y los que respetamos el consenso de la asamblea, y como no hicieron estos grupos. Dejaron claro su actitud oportunista, ya que la información y el discurso somos los propios estudiantes los encargados de generarlos, y eso se consigue mediante la propia acción y no quedándose en casa.
La información, las demandas y la difusión, ha llegado a cada aula, hemos recorrido las 3 facultades en numerosas ocasiones en apenas 1 semana antes de la huelga, hemos discutido y debatido con las y los estudiantes a pie de facultad, hemos agitado todo el campus, pero para ciertos grupos parece ser que no era suficiente trabajo, y decidieron seguir sin apoyar en la practica la huelga.
Decían que no había nada novedoso en esta huelga, pese a contar por primera vez con un equipo negociador para conquistar algunas de las reivindicaciones que afectan directamente a los decanatos de las facultades; pese a tener por fin una lista de reivindicaciones, tanto de mínimos ( mejora del servicio de autobús, no al cierre del campus virtual a los que se retrasen en los pagos, etc ) y de máximos ( universidad gratuita, etc ).
La asamblea de Somosaguas, decidió en consenso hacer 3 días de huelga ( dos de los cuales, los últimos, se cerraría el campus ). Sin embargo estos grupos, tras poner numerosos palos en las ruedas para evitar este consenso, decidió no acatarlo, y mantenerse al margen del cierre de la facultad en los últimos días de huelga.
Es importante remarcar este comportamiento, ya que no deja de ser curioso que quienes más firmemente apuestan por el más puro asamblearismo, cuando sus posturas no son aceptadas por la mayoría, se abstienen de cumplir con los consensos de las asambleas. A la par que es sorprendente que aquellos que tanto repiten por los medios que "sí se puede", luego en su practica diaria de la facultad, cuando las y los estudiantes quieren luchar, nos digan que "no se puede".
Frente a estas posturas alejadas no solo de los intereses objetivos del estudiantado de extracción obrera y popular, si no también del propio ánimo de la mayoría de estudiantes movilizados de hacer huelga, la realidad ha sido bien distinta:
Nutridas asambleas nocturnas, incorporaciones de más compañeras/os a lo largo de las mañanas a los piquetes, respaldo y apoyo de trabajadoras y trabajadores del campus, experiencias de lucha real, de confraternización y aprendizaje ( la gran mayoría de las/os compañeros que asistieron a los encierros y piquetes eran de primero ), etc.
La desmovilización frente a una convocatoria oportunista no hace sino frente común con los esquiroles, huye de las masas y las deja a merced del oportunismo. Por esa razón, pesa a nuestra contundente critica y rechazo al Sindicato de Estudiantes, los CJC hemos apoyado la huelga desde el primer minuto hasta al último, comprometiéndonos con el resto de nuestras/os compañeras/os que al igual que nosotros han demostrado un compromiso firme con la decisión de la asamblea, y han aguantado y trabajado duramente por sacarla adelante del primer al último día.
Por lo tanto, al estudiantado en general, y a estos grupos en particular, les decimos que SI se puede hacer huelga, pero NO quieren hacerla, y aún así, se ha hecho, y ha sido un éxito.
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